Libertad temporal

<< Siempre seremos prisioneros del tiempo. 

Él nos condiciona desde nuestro nacimiento hasta nuestra muerte.

 Podemos predecir su juego pero no cambiar las reglas.>>

 El humano siempre en general, ha luchado por la libertad. La cual es un termino definido como la facultad y derecho de las personas, para elegir de manera responsable su propia forma de actuar dentro de una sociedad. Si nos centramos en esa definición, nos daremos cuenta de que es por lo que la mayoría se levanta de la cama todos los días, buscando la libertad de expresarse según sus principios, la libertad de rezar lo que creas, la de trabajar en lo que realmente te gusta, la de perseguir tus sueños, la de ser feliz. Pero estamos hablando de una libertad social. Aquella que estará predeterminada por el entorno en el que vivamos, encerrada bajo los muros de lo material. Y esa, es justamente la libertad de la que no quería hablaros.

Mi libertad preferida es aquella que posee cada persona en su mente. La que por medio de la palabra ``crear´´ ha hecho posibles las cosas que contemplamos hoy día en el mundo real. Surgiendo del mundo infinito que es la imaginación para deslumbrarnos a cada paso. ¿Quién podía imaginarse como sería ``Guernica´´ de Pablo Picasso sin que el lo hubiera pintado?¿O quién sería capaz de recorrer la Alhambra de Granada con solo cerrar los ojos sin haberla visto jamás? Nadie. 

Yo misma, con las palabras, puedo reconstruir lo que surge en mi vida o en mis pensamientos. Intentando adentrar a mi lector en mi relato, tanto que pueda percibir el sentimiento de la narración o de mi argumento. La escritura nos hace desarrollar esa capacidad que tenemos todos de encender el botón que dice `` imaginar ahora´´ en nuestra cabeza, que nos da la oportunidad de, por medio de unos garabatos llamados letras que forman a su vez unidas palabras, crear y destruir opiniones, lugares, personas, o lo que nos planteemos, siendo de manera instantánea e impredecible como lo haremos o como será lo que hagamos. 

Y llegamos a la libertad de la que quería hablaros. Una libertad en la que he estado pensando últimamente. La que jamás podremos manipular. La que nos ha encerrado bajo cuatro paredes. La libertad del tiempo. Nosotros hemos creado las horas, los minutos, los segundos para guiarnos y orientarnos a lo largo de nuestra vida. Pero si ahora simplemente no existiera nada, nos daríamos cuenta de que aun así, si llevamos a cabo una acción, o simplemente no hacemos nada, no podremos volver atrás y repetirlo o cambiarlo. La frase preferida del tiempo parece ser una que yo he utilizado hace algunos escritos, que es <<sigue siempre adelante>>. 

Y ahí estamos, aunque no queramos, encerrados en el juego del tiempo. A nuestro libre albedrío como humanos, pero con ese permanente hostigamiento de continuar y con la certeza de que algún día nuestro tiempo se acabará.