Gracias por nada

Hoy me gustaría dedicar este espacio a unas personas, más de las que me gustaría,  que me han hecho cambiar totalmente la visión sobre ellas. Pensar una cosa durante mucho tiempo y en una décima de segundo pensar otra. Creer una realidad maravillosa y verla flotar como el humo de un cigarro por el aire. Me duele, haber creído y permitido que en mi cabeza sólo existiera la permisión y no haber tenido prevención ante lo que luego me dejó en estado de shock. Quizá he tenido demasiadas personas así en mi vida. Quizá, tras tantas puñaladas, siga sin aprender la lección. Quizá sea más buena o más tonta de lo que creo dejando que me hagan creer lo que no es y dejar que este sobre una nube idílica para luego caer. No soy un ángel. No soy perfecta ni tampoco de papel o tan siquiera piedra. Soy más bien una estúpida con esperanza. Es bonito seguir creyendo que llegara el día en que todo cambie y se den cuenta de lo que realmente soy. El día en que el equilibrio entre lo que doy y lo que me dan sea tangible y no una mera ilusión. Quiero creer que no todo está perdido en este mundo. Quiero una amistad limpia, pura, transparente. No todo es perfecto, no lo necesito. Necesito que crean en mi, todos a los que doy mi confianza. Y no abandonen ni me vendan por menos que nada. Porqué valgo más de lo que aparento y merezco, como todos, ser feliz. Y en cuanto a esa o esas personas a las que me dirigía sin dirigir mi atención especialmente y sólo mi divagación, gracias. Gracias por hacerme, a base de tortas, aprender. Gracias por hacerme mas fuerte, aunque considero que podía haberme hecho fuerte sin tanta maldad de por medio. Más bien un gracias por nada. Y quizá hasta pronto, o simplemente hasta nunca.


Comentarios

Entradas populares